La experiencia del inquilino: clave para la retención en oficinas

En un entorno donde los modelos híbridos de trabajo redefinen el rol de la oficina, la experiencia del inquilino ha emergido como uno de los factores más determinantes para la retención en edificios corporativos. La competencia por mantener una ocupación estable y de calidad ya no depende únicamente del precio o la ubicación: la percepción y satisfacción del usuario final son también un elemento diferencial.

¿Por qué importa la experiencia del inquilino?

La experiencia del inquilino abarca todos los aspectos relacionados con cómo los ocupantes viven, sienten y utilizan su espacio de trabajo: desde el diseño interior y la iluminación, hasta los servicios disponibles, la gestión del edificio y el clima organizacional que se fomenta en las áreas comunes.

Un análisis publicado en Building Research & Information (Vol. 47, 2019) destaca que los entornos laborales diseñados en torno al bienestar físico, mental y social de los usuarios tienen un impacto directo en la productividad, compromiso y satisfacción de los empleados. Esto, a su vez, se traduce en mayor permanencia en los espacios arrendados.

Evidencia del impacto

Diversos estudios confirman que las empresas están reevaluando el valor de sus oficinas, no como simples espacios operativos, sino como herramientas para atraer talento, reforzar la cultura corporativa y promover la colaboración. Según una encuesta de Leesman Index, basada en más de 800.000 respuestas de empleados en todo el mundo, los lugares de trabajo que ofrecen una experiencia positiva muestran niveles de lealtad y retención significativamente más altos.

Además, el informe de World Green Building Council sobre salud y productividad (2016) vincula el diseño centrado en el usuario con beneficios tangibles para las organizaciones, incluyendo reducción del ausentismo y aumento del rendimiento, lo que refuerza el valor estratégico de una buena experiencia del inquilino.

¿Qué elementos conforman una experiencia sobresaliente?

• Flexibilidad: espacios adaptables que responden a distintas formas de trabajo.
• Bienestar: iluminación natural, ventilación adecuada, acceso a áreas verdes y zonas de descanso.
• Tecnología: soluciones digitales que optimizan el uso del edificio, como apps para reservas o control de accesos.
• Comunidad: actividades que promuevan el networking y el sentido de pertenencia entre empresas inquilinas.
• Atención personalizada: una administración que escuche, resuelva y anticipe necesidades.

Nuestra visión

En Estrada & Partners apostamos por un modelo de gestión donde la experiencia del inquilino no sea un extra, sino el eje central de la propuesta de valor. Comercializamos edificios que no solo cumplen una función operativa, sino que ofrecen valor emocional y humano a sus ocupantes. Esto se refleja en servicios, mantenimiento, estética y, sobre todo, en la atención que brindamos día a día.